COVID-19 | Respuesta del Fondo Mundial
Mejorar la seguridad sanitaria mundial y fortalecer los sistemas de salud locales son aspectos centrales de la misión del Fondo Mundial para ponerle fin a las tres epidemias más mortales del mundo: el sida, la tuberculosis y la malaria.
El COVID-19 está teniendo un impacto devastador en las comunidades y en los sistemas de salud a nivel mundial. El Fondo Mundial, como el mecanismo multilateral de financiamiento mediante subvenciones más grande que existe en materia de salud mundial, está actuando rápidamente junto con la OMS y socios mundiales en salud para responder a la crisis del COVID-19.
El Fondo Mundial recauda e invierte más de 4 mil millones de dólares al año para apoyar programas que luchan contra el sida, la tuberculosis y la malaria en más de 100 países. Necesitamos la infraestructura y las capacidades para derrotar enfermedades como el sida, la tuberculosis y la malaria –cadenas de suministro médico, laboratorios, trabajadores comunitarios de salud y vigilancia de las enfermedades– para identificar y responder a nuevos brotes como el del COVID-19.
Financiamiento
- 31 SUBVENCIONES PAÍS
- 2 SUBVENCIONES MULTIPAÍS
ESTÁN USANDO EL APOYO DEL FONDO MUNDIAL PARA LUCHAR CONTRA EL COVID-19
Para luchar contra el COVID-19 y mitigar el impacto que tendrá la pandemia en programas contra el VIH, la tuberculosis y la malaria en contextos vulnerables, el Fondo Mundial está permitiéndoles a los países usar hasta el 5 % de la subvención aprobada para ayudar a proteger y tratar a comunidades vulnerables. El monto disponible para ayudar a proteger y tratar a comunidades vulnerables de todo el mundo es de aproximadamente 500 millones de dólares.
Con estas nuevas directrices, el Fondo Mundial está instando a los países a redistribuir activos subutilizados, a redireccionar los montos ahorrados de las subvenciones y, en casos excepcionales, a reprogramar el financiamiento de subvenciones existentes. Algunas de las actividades según las nuevas directrices por el COVID-19 incluyen, entre otras, la evaluación de la preparación para la epidemia, pruebas de laboratorio, el transporte de muestras, el uso de infraestructura de vigilancia, el control de infecciones en instalaciones sanitarias y campañas de información. Ver más.
Fuente: PLataforma LAC