Tuberculosis en tiempo de COVID-19

La Administración Municipal, se permite informar a la comunidad en general la necesidad de intensificar los cuidados de las personas con tuberculosis en el marco de la emergencia sanitaria COVID-19. Razón por la cual se permite compartir preguntas y respuestas frente al tema emitidas por la OMS

¿Es posible que las personas con TB tengan un mayor riesgo de infección, enfermedad y muerte por COVID-19?

Las personas enfermas con COVID-19 y TB muestran síntomas similares como tos, fiebre y dificultad para respirar. Ambas enfermedades atacan principalmente a los pulmones y, aunque ambos agentes biológicos se transmiten principalmente a través de contactos cercanos, el período de incubación desde la exposición a la enfermedad es más largo en la TB y suele presentar un inicio lento.

Aunque la experiencia sobre infección por COVID-19 en pacientes con TB es limitada, se prevé que las personas enfermas con TB y COVID-19 pueden tener peores resultados de tratamiento, especialmente si el tratamiento de la TB se interrumpe.

Los pacientes con TB deben tomar las precauciones recomendadas por las autoridades sanitarias para protegerse del COVID-19 y continuar su tratamiento según lo prescrito.

2. ¿Qué deben hacer las autoridades de salud para mantener la sostenibilidad de los servicios esenciales de TB durante la pandemia de COVID-19? ¿Qué servicios se pueden potenciar para ambas enfermedades?

Las autoridades de salud deben mantener el apoyo a los servicios esenciales de TB, incluso durante emergencias como la del COVID-19. Debe garantizarse la prestación de servicios de prevención, diagnóstico, tratamiento y atención de la TB centrados en las personas, junto con la respuesta al COVID-19.

Prevención:
Deben adoptarse medidas para limitar la transmisión de TB y COVID-19 en sitios de congregación y en los establecimientos de salud, según las  directrices de la OMS  y los  lineamientos regionales de OPS . Aunque los modos de transmisión de las dos enfermedades son ligeramente diferentes, las medidas de control de infecciones de TB son aplicables a ambas (por ejemplo, etiqueta de la tos, separación de personas con sospecha de estar afectadas, medidas de protección personal).

La provisión de tratamiento preventivo de la TB debe mantenerse como sea posible ya que beneficia tanto a los pacientes y al control de la epidemia de TB, como a reducir el impacto negativo de la pandemia del COVID-19.

Diagnóstico:
as pruebas diagnósticas de alta precisión son esenciales tanto para la TB como para el COVID-19. Las pruebas para las dos condiciones son diferentes y ambas deben estar disponibles para personas con síntomas respiratorios, los cuales pueden ser similares para las dos enfermedades.

En los países se han establecido redes de laboratorios de TB con el apoyo de la OMS y de los socios internacionales. Estas redes, así como los mecanismos de transporte de muestras, también podrían usarse para el diagnóstico y la vigilancia del COVID-19.

Tratamiento y atención:

El personal del programa de TB con su experiencia y capacidad que incluye la búsqueda activa de casos y la búsqueda y seguimiento de contactos los ubica como un recurso valioso para compartir conocimientos, experiencias y brindar apoyo técnico y logístico.

Debe garantizarse la provisión de tratamiento antituberculosis, de acuerdo con las últimas recomendaciones de la OMS, para todos los pacientes con TB, incluidos aquellos en cuarentena por COVID-19 y aquellos con infección confirmada.

La atención ambulatoria centrada en el paciente y la atención basada en la comunidad de los pacientes con TB deben preferirse decididamente sobre el tratamiento hospitalario (a menos que existan condiciones graves que requieran hospitalización), para reducir las oportunidades de transmisión.

El uso de las tecnologías digitales de salud debe intensificarse para apoyar a los pacientes y los programas a través de una mejor comunicación, asesoramiento, atención y gestión de la información, entre otros beneficios.

Planificación proactiva, adquisición, suministro y gestión de riesgos:


La planificación y el monitoreo adecuados son esenciales para garantizar que no se interrumpan la adquisición y el suministro de los medicamentos, equipos e insumos diagnósticos de TB.

La OMS está monitoreando el suministro de medicamentos a nivel mundial, mientras que el Fondo Mundial, el Servicio Farmacéutico Mundial de la Alianza Alto a la TB (GDF por sus siglas en inglés), Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Unitaid y otros donantes, juegan un papel esencial en el apoyo a los países para asegurar un suministro adecuado y sostenible de medicamentos y equipos e insumos diagnósticos para TB. Se aconseja a los países que realicen sus pedidos para entrega en 2020 lo antes posible debido a los retrasos esperados en los mecanismos de transporte y entrega.

Recursos Humanos:
Los neumólogos, el personal de salud respiratoria de todo tipo, el personal de TB y los trabajadores de salud de atención primaria, pueden ser puntos de referencia para pacientes con complicaciones pulmonares por COVID-19. Deben familiarizarse con las  recomendaciones de la OMS para el tratamiento de apoyo y la contención del COVID-19 . La detección y el tratamiento de apoyo eficaz pueden reducir la morbilidad y la mortalidad tanto por la infección por COVID-19 como por la mayoría de las formas de TB.

Desarrollo de Capacidades:
La respuesta al COVID-19 puede beneficiarse de la inversión que ha realizado durante muchos años las autoridades nacionales y los donantes para el desarrollo de capacidades en TB. Estos incluyen control de infecciones, búsqueda y seguimiento de contactos, atención domiciliaria y basada en la comunidad, así como en sistemas de vigilancia y monitoreo para TB.

Fuente: GOV.CO