Proteger a los más vulnerables en América Latina y el Caribe en tiempos de COVID-19

América Latina y el Caribe han realizado importantes avances en la lucha contra el VIH, la tuberculosis y la malaria en las últimas décadas. Pero la pandemia del COVID-19 ha golpeado duramente a la región, y sus efectos indirectos podrían permitir el resurgimiento de las enfermedades infecciosas.


Con menos del 10% de la población mundial, América Latina y el Caribe tenía el 28% de todos los casos de COVID-19 y el 34% de todas las muertes en octubre de 2020. Desde el comienzo de la pandemia, la asociación del Fondo Mundial se ha apresurado a apoyar a los gobiernos de la región y a las organizaciones comunitarias para proteger los logros alcanzados con tanto esfuerzo en materia de VIH, tuberculosis y malaria, y para apoyar las respuestas de los países al COVID-19.

Con las comunidades a la cabeza, el Fondo Mundial está apoyando herramientas y soluciones innovadoras para responder a la crisis del COVID-19. Entre ellas se incluyen aplicaciones digitales para reservar una prueba de diagnóstico del VIH, videollamadas para supervisar el cumplimiento del tratamiento de la tuberculosis, la ampliación de los diagnósticos moleculares y la vigilancia de los laboratorios, y equipos de protección para los trabajadores sanitarios que distribuyen mosquiteros puerta a puerta. La crisis también ha creado oportunidades para que la región cambie a prácticas más eficaces, como la dispensación de antirretrovirales para el VIH durante varios meses y la ampliación del autodiagnóstico, logros que se mantendrán para los programas a largo plazo. Pero el Fondo Mundial también se está quedando sin recursos para luchar contra el COVID-19 y se necesitan urgentemente más fondos. A medida que los trastornos económicos aumentan la desigualdad y hunden a los más vulnerables en la pobreza, es más importante que nunca asegurarse de que nadie se quede atrás.

Cuando COVID-19 llegó a Guatemala, el centro de salud comunitario donde Bryanna y sus compañeras trabajadoras del sexo se hacían la prueba del VIH cerró sus puertas. Con el apoyo del Fondo Mundial, un proyecto piloto de kits de autodiagnóstico está ayudando a personas como Bryanna a seguir teniendo acceso a la prevención y el diagnóstico del VIH. Los kits se entregan por correo e incluyen un autotest, preservativos, lubricantes y folletos sobre cómo mantenerse sano. “El kit es muy fácil de usar y puedo hacerlo en casa, así que ahora puedo hacerme la prueba periódicamente”, dijo Bryanna.

Fuente: El Fondo Mundial / James Rodriguez / Panos / Foto: Fondo Mundial