Coinfeccion: Tuberuculosis y Covid-19 a nivel mundial
La tuberculosis (TB), con sus 10 millones de casos estimados y 1,3 millones de muertes anuales, sigue siendo una prioridad de salud mundial. La pandemia de la enfermedad del síndrome respiratorio agudo severo por coronavirus 2 (SARS-CoV-2) (COVID-19) requería un enfoque y una acción de salud pública concertada debido a su rápida propagación global, gravedad clínica, alta tasa de mortalidad con 4 millones de muertes y capacidad para abrumar los sistemas de atención médica. El impacto de COVID-19 en los servicios de TB ha sido bien descrito , con una reducción del número de casos de TB diagnosticados y manejados en la mayoría de los países como resultado combinado de acceso reducido, diagnóstico retrasado con formas más avanzadas y servicios de salud sobrecargados, entre otras razones.
Según el informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hubo una disminución del 18 % en las notificaciones de casos de TB entre 2019 y 2020 (de 7. 1 a 5,8 millones de casos) [1]. Los modelos conservadores sugieren un aumento del 20% en las muertes por TB en los próximos 5 años como resultado de la pandemia.

Distribución global de los Países/Estados/Regiones participantes en el estudio.
los siguientes Estados/Territorios están cubiertos en el estudio: Australia (Nueva Gales del Sur); Canadá (Estado de Ontario): China (Wenzhou y Luzhou); India (Estados de Nueva Delhi, Mumbai y Maharashtra); Federación Rusa (Óblasts de Arkhangelsk, Moscú y Volvograd); Suiza (Condado de Vaud); Estados Unidos (Estado de Virginia)
21 países (Argentina, Bielorrusia, Bélgica, Brasil, Chile, China, Francia, República de Guinea, India, Italia, México, Níger, Panamá, Perú, Portugal, Rumania, Rusia, Singapur, España, Suiza y Reino Unido) informaron en menos un caso de TB/COVID-19 en 2020. Otros países (Australia, Canadá, Colombia, Grecia, Honduras, Lituania, Países Bajos, Omán, Paraguay, Serbia, Eslovaquia, Sudáfrica y EE. UU.) comenzaron a informar a partir de 2021.
Fuente: Esta publicacion ha sido extraida de un estudio de European Respiratory Journal